sábado, 20 de agosto de 2011

Del Triciclo al Cohete

Iniciando en la yema
rodeado de transparencia,
anclado durante semanas,
guardando las horas.

Clavados valientes
me expulsan fuera,
sacando mis pies,
tocando la tierra.

Piedras mágicas
marcan el camino,
tropiesan las ruedas,
me mantengo tranquilo.

Pequeños fuegos
corren en círculos,
elevandome, buscando,
siguiendo un cielo azulino.




Sueños y cometas
se cruzan ante mis ojos,
chocan con planetas
quedando todos rotos.

Y en el fondo de mi bolsillo
una goma de mascar,
tomo algunas piezas
y comienzo a pegar
la ruta de mi viaje
que acaba de empezar,
el que seguiré recorriendo
hasta nunca jamás.


Sebastián J.

No hay comentarios:

Publicar un comentario